Santa Fe busca una reforma de la policía local.

El Gobierno de Santa Fe avanza en una reforma de la policía provincial, una de las promesas de campaña que había hecho el gobernador Omar Perotti como respuesta a la preocupación por el aumento de los hechos de violencia, en muchos casos ligados a casos de narcotráfico.

Los escándalos en torno a la connivencia con el delito de la policía y el Poder Judicial tuvieron el fin de semana un nuevo capítulo. El jefe de la Policía de Santa Fe, Víctor Sarnaglia, es investigado por haber recibido coimas con dinero proveniente del juego clandestino.

Anteriormente, el exjefe de los fiscales de Rosario, Patricio Serjal, había quedado detenido luego de que la jueza Eleonora Verón dispusiera la prisión preventiva por 90 días, en el marco de una causa que lo investiga por su presunta vinculación al juego clandestino y a la banda narco de “Los Monos”. La misma suerte corrió el fiscal Gustavo Ponce Asahad,también acusado de haber recibido dinero proveniente de actividades ilícitas.

Así, el gobierno de Perotti acelera la reforma de la Policía de la provincia. El ministro de Seguridad Marcelo Saín ya anunció la intención de reestructurar la fuerza. Y también se envió a la legislatura santafesina un paquete de leyes que avanzan en ese objetivo.

La reforma implicaría dividir la fuerza en tareas de investigación, en la prevención del delito y en los asuntos internos.

También hay un capítulo destinado a la modernización, donde sobresale el eje de la capacitación, donde se contempla la perspectiva de género.

Asimismo, y ante los hechos en que policías han quedado implicado en causas del narcotráfico, la reforma pretende gestionar las faltas disciplinarias y poner un peso punitivo mayor en los policías que cometan actividades ilegales.