La secretaria electoral de la provincia, Claudia Catalín, aseguró que fueron escrutadas unas 1.500 mesas en la primera jornada del escrutinio definitivo de las elecciones generales de Santa Fe, en tanto que cerca de 45 urnas fueron abiertas para contar voto a voto por algunas diferencias con las actas.
"Hemos abierto unas 45 urnas para hacer los conteos de alguna categoría que tenía alguna diferencia", indicó Catalín, quien ejemplificó que "hubo una urna donde faltaba un voto de gobernador, y se privilegia la certeza y que todos se queden conformes y se saquen todas las dudas, máxime en la categoría de gobernador".
Dijo que el ritmo de trabajo avanza "muy bien" principalmente porque "las actas son mucho más cortas y tienen menos datos" que en el escrutinio de las primarias abiertas simultáneas y obligatorias (Paso), además de destacar que "los telegramas tienen números muy prolijos, bien sumado, todo completo. Eso tambiín le da agilidad al proceso".
Catalín enfatizó que "no sólo se revisarán las 304 mesas desestimadas sino todas aquellas sobre las cuales los apoderados planteen dudas. Primero se trabajará con las actas y los certificados, y de ser necesario se abrirán las urnas".
En esta primera jornada del escrutinio definitivo se procedió, como es habtiaul, en orden alfabítico y se procesaron todos los datos de seis departamentos: Belgrano, Caseros, Castellanos, Constitución, Garay, General López y General Obligado. Mañana continuarían con Iriondo y probablemente alcancen a completar La Capital.
El escrutinio definitivo se realizará todos los días, de 8 a 13 y de 15 a 20, y no descartan trabajar el feriado del sábado 20 de junio.
El trabajo del Tribunal Electoral de la provincia, acompañado por decenas de fiscales de todas las fuerzas políticas que participaron de los comicios, se inició luego de que anoche la autoridad electoral desestimó un pedido del Frente Justicialista para la Victoria, de Unión PRO y del Frente de Izquierda para que se recuenten cada voto de todas las urnas.
El organismo les dio la razón a los apoderados del Frente Progresista Cívico y Social, que invocaron el Código Electoral Nacional para fundamentar su pedido que sólo sean abiertas las urnas desestimadas por errores en los telegramas y las que por alguna otra razón estuviesen bajo sospecha.
Fuente: otrosambitos.com.ar