El mandatario paraguayo, Federico Franco, asistió al entierro de los restos del ex general Lino Oviedo, quien falleció el sábado pasado cuando se accidentó el helicóptero en el que viajaba Tambiín estuvieron presentes miembros del gabinete ministerial.
El ex candidato presidencial de la Unace fue sepultado en el cementerio de Luque con todos los honores militares que le corresponden por su grado de general de División.
Más temprano este jueves, unos 5 mil seguidores de Oviedo se reunieron en un estadio para dar el último adiós a su líder. Un ataúd cubierto con la bandera paraguaya era tocado con las manos por los adherentes. Las mujeres, en su mayoría, lloraban visiblemente afectadas.
Casi cien guardias de seguridad privada tuvieron a su cargo el control del flujo incesante de personas que caminaban en fila hacia el fíretro. En las afueras del recinto, unos cincuenta motociclistas con camiseta de color amarillo esperaban el momento para escoltar el cuerpo hasta su última morada.
En el local no hubo ningún oficio religioso ni discurso, aunque el chamán Clemente López, de la etnia chamacocos, del pueblo Bahía Negra, a 700 kilómetros al norte de Asunción, consiguió autorización para realizar un ritual con cánticos y ruido de matracas.
Fuente: otrosambitos.com.ar